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La irrupción de la Inteligencia Artificial (IA) en el ámbito de la salud se está traduciendo, nos guste o no, en una revolución en la forma en que se prestan los cuidados y se garantiza la seguridad del paciente. Este post busca explorar la relación entre la IA, los cuidados de salud y la seguridad del paciente, abordando tanto sus beneficios como sus desafíos, y contemplando los aspectos éticos y legales involucrados.

La IA ha demostrado ser una herramienta valiosa en múltiples aspectos de la atención sanitaria. Desde el diagnóstico asistido por ordenador hasta la gestión de datos del paciente, la IA ha mejorado la precisión y eficiencia de la atención de salud. Por ejemplo, los algoritmos de aprendizaje automático han sido eficaces en la detección temprana de enfermedades crónicas, como la diabetes o ciertos tipos de cáncer, lo que permite intervenciones más tempranas y un mejor pronóstico para los pacientes.

 

Bates DW, Levine D, Syrowatka A et al, Bates, D.W., Levine, D., Syrowatka, A. et al. The potential of artificial intelligence to improve patient safety: a scoping review. npj Digit. Med. 2021; 4, 54., destacan en una scoping review publicada en el año 2021 el  enorme potencial de la IA como herramienta para mejorar la Seguridad del Paciente al ayudar a predecir posibles daños y recopilar información, tanto a nivel hospitalario como en entornos ambulatorios y comunitarios, permitiendo la combinación de la IA junto a enfoques digitales mejorar la comunicación entre los profesionales sanitarios y entres estos y los pacientes. Dichos autores identifican evidencia acerca de la utilización de IA en la prevención de diferentes eventos adversos como las infecciones asociadas a los cuidados de salud (IACS), tromboembolismo venoso, complicaciones quirúrgicas, lesiones por presión, caídas y errores diagnósticos.

“La Inteligencia Artificial tiene el potencial de transformar radicalmente la atención sanitaria y la Seguridad del Paciente, mejorando la eficiencia, precisión y personalización del cuidado del paciente.

 

Beneficios de la IA en atención de salud

  • Diagnóstico y Tratamiento Mejorados: La IA puede analizar rápidamente datos complejos y ayudar en diagnósticos precisos, reduciendo errores médicos.
  • Monitorización y Prevención: Los sistemas basados en IA pueden monitorear constantemente el estado de salud de los pacientes, anticipando complicaciones.
  • Personalización de la Atención: La IA permite tratamientos personalizados, ajustados a las características individuales de cada paciente.

De todas maneras, la implementación de la IA en la atención de salud no está exenta de desafíos. Uno de los principales es la preocupación por la privacidad y seguridad de los datos del paciente. La IA requiere de grandes volúmenes de datos para su entrenamiento y funcionamiento, lo que plantea riesgos de brechas de seguridad y uso indebido de información sensible.

Otro elemento a tener en cuenta es que, con el despliegue de la IA en la atención de salud, pueden surgir diferentes riesgos y retos a nivel individual (por ejemplo, concienciación, educación, confianza), a nivel macro (por ejemplo, regulación y políticas, riesgo de lesiones debidas a errores de la IA) y a nivel técnico (por ejemplo, usabilidad, rendimiento, privacidad y seguridad de los datos), tal como Choudry et al. destacan en su revisión sistemática ( Choudhury A, Asan O. Role of Artificial Intelligence in Patient Safety Outcomes: Systematic Literature Review. JMIR Med Inform. 2020; 8(7): e18599. Published 2020 Jul 24. doi:10.2196/18599.  )

Muchos de los sistemas basados en IA que se utilizan en atención de salud son sistemas de asistencia a la toma de decisiones, es decir, que son los profesionales de la salud quienes toman la decisión sobre si seguir o no hasta el final las recomendaciones del sistema También hay que tener en cuenta que además, existe el riesgo de que las decisiones automatizadas de la IA puedan carecer de la empatía y comprensión contextual que un profesional de la salud proporciona, lo que podría llevar a una posible deshumanización del cuidado (Sujan M, Furniss D, Grundy K, Grundy H, Nelson D, Elliott M, et al. Human factors challenges for the safe use of artificial intelligence in patient care. BMJ Health Care Inform. 2019; November;26(1):e100081.)

Además, los seres humanos cumplimos con unas condiciones de control y epistémicas que no cumple una máquina, al menos al 100%. Por otra parte, la decisión de poner en práctica las recomendaciones se verá afectada por factores estructurales y organizativos más amplios, como la carga de trabajo del clínico, el entorno laboral y el desarrollo de la dependencia de la automatización.

Asignar la decisión final a un clínico crea dilemas morales y de seguridad. Delegar una parte del proceso de toma de decisiones en los sistemas de inteligencia artificial plantea importantes cuestiones sobre hasta qué punto el clínico es responsable del posible daño causado al paciente (Habli I, Lawton T, Porter Z. Artificial intelligence in health care: accountability and safety. Bull World Health Organ. 2020;98(4):251-256. doi:10.2471/BLT.19.237487).

La IA en la atención sanitaria también plantea importantes cuestiones éticas y legales. ¿Quién es responsable cuando un sistema de IA comete un error que afecta la salud del paciente? ¿Cómo se garantiza que los algoritmos no sean sesgados y ofrezcan un tratamiento justo a todos los pacientes, independientemente de su origen étnico o estatus socioeconómico? (Classen, D.C., Longhurst, C.,Thomas, E.J. Bending the patient safety curve: how much can AI help?. npj Digit. Med.2023; 6 (2). https://doi.org/10.1038/s41746-022-00731-5).

 

Desafíos y aspectos éticos relacionados con la Inteligencia Artificial (IA) en atención de salud

  • Privacidad de los Datos: La gestión de enormes cantidades de datos personales de salud plantea serios desafíos en cuanto a privacidad y seguridad.
  • Sesgo Algorítmico: Existe el riesgo de que los algoritmos reflejen sesgos inherentes en los datos de entrenamiento.
  • Responsabilidad de los profesionales: Determinar la responsabilidad en caso de errores de diagnóstico o tratamiento involucrando IA es complejo.

En el caso de dispositivos de IA basados en la gestión de imágenes, como ocurre con muchos dispositivos relacionados con el cuidado de heridas, o las úlceras por presión, también cobra importancia ética el hecho de que los profesionales invitados a testar dichos dispositivos conozcan y den su consentimiento para el uso de estas imágenes por parte de los desarrolladores de las aplicaciones.

La incorporación de la inteligencia artificial en los dispositivos médicos presenta desafíos únicos en términos de regulación y control de calidad. Es crucial que los organismos reguladores, como la FDA en Estados Unidos y la Agencia Europea del Medicamento (EMA) en Europa, establezcan directrices claras para garantizar la seguridad y eficacia de estos dispositivos. Las regulaciones deben abordar aspectos como la validación de algoritmos de IA, la protección de datos del paciente y la responsabilidad en caso de errores o fallos. Este marco regulatorio es esencial para mantener la confianza del público y asegurar que los avances tecnológicos en la atención sanitaria se realicen de manera segura y ética. En Europa, y en relación a aplicativos para dar soporte al cuidado de heridas, la EMA requiere en función del posible riesgo para los pacientes, la clasificación como clase I para los dipsoitivos que miden heridas y la clase II a para los que aportan información para orientar el diagnóstico o clasificación y el tratamiento.

 

Aspectos legales y regulatorios de la Inteligencia Artificial (IA) en atención de salud

  • Regulación de Software como Dispositivo Médico: Los sistemas de IA deben cumplir con las regulaciones de dispositivos médicos para asegurar su seguridad y eficacia.
  • Consentimiento Informado: Se debe garantizar que los pacientes entiendan cómo la IA se utiliza en su atención.

Mirando hacia el futuro, se espera que la Inteligencia Artificial (IA) continúe desempeñando un papel crucial en la transformación de la atención sanitaria. Es probable que veamos una integración más profunda de la IA en la monitorización remota de pacientes, así como en la personalización de tratamientos basados en análisis predictivos. Sin embargo, es fundamental que esta evolución vaya acompañada de una regulación adecuada y de una formación continua de los profesionales de la salud en las nuevas tecnologías, para garantizar que los beneficios de la IA se maximicen mientras se minimizan sus riesgos.

El futuro de la IA en salud promete avances como la mejora continua a través del aprendizaje automático y la integración más profunda con la telemedicina y los registros digitales. Sin embargo, se necesitan investigaciones adicionales para superar los desafíos actuales y maximizar sus beneficios.

A modo de conclusión, la IA tiene el potencial de transformar radicalmente la atención sanitaria y la Seguridad del Paciente, mejorando la eficiencia, precisión y personalización del cuidado del paciente. Sin embargo, es esencial abordar sus desafíos, en especial en lo que respecta a sus limitaciones, a la ética y la legalidad, para garantizar que su implementación beneficie tanto a los profesionales de la salud como a los pacientes. A medida que avanzamos, la colaboración entre tecnólogos, profesionales de la salud, legisladores y pacientes será clave para forjar un futuro en el que la IA contribuya significativamente a la mejora de la atención sanitaria y la Seguridad del Paciente.

 

Aspecto

Beneficios Desafíos Futuro
Diagnóstico Mayor precisión Sesgo algorítmico IA autoaprendizaje
Tratamiento Personalización Responsabilidad médica Integración con nanotecnología
Seguridad del Paciente Prevención de errores Privacidad de datos Mejor monitorización remota
Aspectos Éticos Mejora en la toma de decisiones Consentimiento informado Directrices éticas claras
Aspectos Legales Cumplimiento regulatorio en relación a gestión de la información y a posibles riesgos para pacientes Adaptación de leyes existentes Normativas específicas para IA

 

 

Joan Enric Torra Bou

 

(Nota del autor: Para la elaboración del presente post he utilizado como herramienta de soporte de inteligencia artificial ChatGPT 4. Las ilustraciones han sido generadas con DALL.E ChatGPT)

 

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