Skip to main content

Hablamos con Nuria Alonso, enfermera y Product Manager Europe Personal Care, Repositioning & Offloading de Medline.

Nuria, ¿Piensas que la pandemia de COVID ha influido en la Seguridad del Paciente y la integridad cutánea?

La pandemia de COVID ha retado al máximo nuestro sistema de salud. La gravedad de los casos y el nivel de ocupación de las instituciones han puesto de manifiesto la falta de personal y recursos necesarios para poder proporcionar un adecuado nivel de cuidados del paciente. Y esto no ha ocurrido sólo tras las paredes de los hospitales, lo hemos presenciado todos los ciudadanos a través de nuestras experiencias personales y en los telediarios todos los días.

Teniendo en cuenta que no se pueden crear profesionales a golpe de barita mágica, la pregunta es: ¿se podrían haber hecho mejor las cosas con otros recursos, u otros productos? ¿Hemos aprendido algo?

“Es muy habitual encontrar los pacientes tumbados sobre no uno, sino varios empapadores tradicionales que tienen como finalidad real proteger las sábanas y no la propia piel del paciente y encima mantienen la piel constantemente húmeda. “

 

¿Cómo veis desde Medline el estado actual de la Seguridad del Paciente y la integridad cutánea en España tras haber superado la pandemia?

La pandemia ha sacado de la zona de confort a la mayoría de los profesionales sanitarios, que se han visto obligados a usar su conocimiento y creatividad para salir de ciertas situaciones por el bien del paciente. Así, por ejemplo, muchos han tenido que aprender cómo pronar a un paciente crítico, técnica que no era desconocida, pero sí bastante poco habitual. En este sentido, las técnicas nuevas han forzado al personal involucrado a aplicar medidas para la protección de la piel y para la prevención de lesiones cutáneas.

Sin embargo, las situaciones más habituales han visto reforzadas ciertas técnicas menos recomendables bajo un prisma de priorización y de total aceptación. Y es que problemas como las lesiones cutáneas asociadas a la humedad (LESCAH) se han dado por hechas. Es sólo cuando aparecen y el daño ya está hecho que se ponen en marcha medidas de actuación.  Llegados a este punto, la inversión en tiempo, esfuerzo y dinero se ha visto incrementada dramáticamente.

Centrándonos en las LESCAH, este sería el caso del uso del empapador tradicional. Una lámina plástica que no permite el paso de aire, cubierta por una capa de celulosa, que no está diseñada para absorber grandes cantidades de líquido y retenerlo, y mucho menos para permanecer varias horas en contacto directo con la piel del paciente. Para evitar las LESCAH es de lógica intentar retirar, en la mayor medida posible, la propia humedad del contacto directo con la piel del paciente. Sin embargo, es muy habitual encontrar los pacientes tumbados sobre no uno, sino varios empapadores tradicionales que tienen como finalidad real proteger las sábanas y no la propia piel del paciente y encima mantienen la piel constantemente húmeda.

¿Cuál es vuestro posicionamiento (como compañía) al respecto?

Desde Medline trabajamos con un equipo técnico y clínico que dirige sus esfuerzos hacia la prevención. El objetivo es aportar al mercado la tecnología necesaria para reducir el vacío entre las necesidades de un sistema de salud bajo presión y las necesidades de una población que día a día aumenta su dependencia y envejece más. En Medline creemos que la prevención es un factor fundamental en la efectividad de los planes de cuidados. El epicentro de cada proyecto es el beneficio del usuario final: el paciente; sin olvidar los beneficios que podemos aportar a los profesionales de la salud en términos de reducción de esfuerzo, tiempo y complejidad logística, así como a las instituciones de salud y al propio Sistema de Salud en la reducción de gastos asociados a problemas evitables y a mejorar su seguridad y calidad asistencial.

 ¿Estáis trabajando en nuevas soluciones/proyectos en relación a la Seguridad del Paciente y la integridad cutánea?

En Medline estamos trabajando actualmente en dos grandes proyectos:

  • Ultrasorbs®, nuestra opción para reducir las lesiones cutáneas asociadas a la humedad. Ultrasorbs® es una línea de productos súper absorbentes con tecnología SAP (Polímero superabsorbente) para mejor absorción y retención de la humedad. Ultrasorbs® son láminas transpirables que favorecen la termo-regulación y son compatibles con colchones de baja pérdida de aire.
  • Comfort Glide ®, nuestra propuesta para el correcto reposicionamiento del paciente encamado. Comfort Glide ® es nuestro sistema de asistencia durante los cambios posturales que reduce, tanto el esfuerzo del profesional para la movilización del paciente en la cama, como las fuerzas de fricción y cizalla tan dañinas para la piel vulnerable.

 Nuria, tras más de un año de existencia de prevencionulcerasyheridas.com, ¿Cómo valoráis nuestro recurso?

Prevencionulcerasyheridas.com ha llegado para reivindicar la importancia de la prevención. Un lugar donde el acceso a información acerca de la tecnología aplicada a los cuidados, desde los recursos más simples hasta algunos más complejos, pone de manifiesto que la Seguridad del Paciente es posible desde la prevención.

 ¿De cuál de vuestros productos/soluciones sobre Seguridad del paciente e integridad cutánea te gustaría hablar con mayor profundidad? ¿por qué?

 Ultrasorbs® es definitivamente un producto sobre el que merece la pena profundizar debido a la gran aportación tecnológica que representa.

 ¿Qué nos puedes contar acerca de este producto/solución?

 Ultrasorbs® nace como respuesta a un planteamiento muy sencillo: para proteger a un paciente de un factor que pueda dañarle hay que hacer lo posible por retirar ese factor. En este sentido, nos encontramos con un entorno sanitario que reconoce la humedad como factor dañino, pero que se encuentra desprovista de los medios adecuados para retirarla o controlarla. Con ello la prevención se hace prácticamente imposible y, al no poder retirar ese factor, hemos pasado directamente al tratamiento de lesiones cutáneas cuando el daño ya está hecho.

Actualmente en el mercado encontramos productos capaces de contener líquido en un espacio bidimensional reducido, por ejemplo, un pañal o un empapador. Pero, ¿y si pudiéramos “despegar” esa humedad de la piel del paciente en un tercer eje?

Aquí es donde una superficie rectangular que no enclaustra pliegues cutáneos y que es transpirable empieza a parecer interesante. Si le añadimos la tecnología del SAP (polímero súper absorbente) conseguiremos, no sólo retirar la humedad del contacto directo con la piel del paciente, sino también retenerla dentro del protector súper-absorbente, favoreciendo así que, durante horas, la piel permanezca seca, y de esta manera, contribuyendo a evitar las LESCAH como la dermatitis asociada a la incontinencia (DAI)

Para más información, podéis visitar este vídeo o este otro vídeo . También podéis visitar nuestra web y conocer más a fondo Ultrasorbs®.

 ¡¡Muchas gracias Nuria¡¡

Enviar respuesta